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30 de Diciembre 2003
Regalo de Navidad
-¿Si?
- Joaquín, soy Rocio, la de la limpieza. Han robado en el despacho.
¿Qué?- Tardo aún medio segundo en Reaccionar mientras busco el despertador con la mirada. Marca las 6:30 de la mañana. Sabía que Rocio Madrugaba; pero esto es hasta exagerado. - ¿Qué ha pasado?
- Cuando entraba en el despacho he oido un ruido y he visto a un hombre en la terraza. Ha saltado.
- ¿Le has podido ver bien?
- No.
- Vale, no te muevas de allí. Tardo quince minutos.
Doce minutos más tarde estaba entranddo por la puerta del despcho. Quiza sea por la hora, o quizás sea por las propias navidades, pero la carretera de la Coruña estaba curiosamente despejada cuando me he jugado el tipo lanzandome a toda velocidad casi a lo kamikaze para llegar cuanto antes.
En el despacho, el panorama era desalentador, todo revuelto y patas arriba pese que a robar, no habían robado demasiado. Más que el robo en sí, lo que jode es el destrozo y la sensación de haber visto violado tu despacho. Tu intimidad; tu casa, a fin de cuentas. Por lo menos el Caco no la ha tomado con los expedientes, porque si le da por revolver en el fichero, aún estabamos ordenandolos. Rocío estaba hecha un manojo de nervios.La pena es que el ladron no se ha descalabrado cuando se ha descolgado por la terraza. Anda que no me hubiese reido. Luego toda la mañana perdida entre ir a la Comisaria a denunciar y a esperar que llegasen los de la policía cientifica, que lamentandolo mucho, pierden mundos entreos al lado del Grissom y compañía. Ni una huella legible según ellos.
Y ahora a pelearnos con los del seguro. Que si los objetos no estaban declarados, que si la poliza sólo cubre hasta tanto en efectivo. Bonitas navidades, si señor.
Que aún digan que Madrid es una ciudad segura...
Feliz salida de año.
Posted by Towsend at 4:54 PM
29 de Diciembre 2003
Cena
Consomé de ternera con arroz frito.
Sushi de Atún con Mandarina, Huevas Frescas de Trucha y Mayonesa de Wasabi.
Solomillo de Ternera a la salsa Tournedó-Rossini
Sorbete de higos chumbos.
Taza de Chocolate caliente con especias y churros fritos.
Todo ello regado abundantemente con Cava Maria Casanovas Brut Nature Gran reserva.
¿Os he dicho que adoro la navidad?
Posted by Towsend at 1:15 PM
25 de Diciembre 2003
Familia.
Decía un amigo, hace ya mucho tiempo, que la familia son esos señores con los que no tienes absolutamente nada en común, y con quienes estás obligado a llevarte bien. Especialmente en lo que la hipocresía social viene a llamar “esas fechas tan señaladas”. No hay una visión más espeluznante que la de una mesa “king Size” donde hay un montón de personas que se miran con desconfianza y se lanzan pullitas durante toda la noche hasta que estallan en gritos, hasta que a veces tiene que disolver la policía la reunión.
Hace muchos años, la Abuela María celebraba todas las cenas y comidas de la navidad en la gran casa solariega, rodeada de su marido y sus seis maravillosos hijos. El abuelo murió siendo éstos pequeños, pero quedó la costumbre de celebrar las fiestas en casa de la abuela, donde se reunían para comer en armonía, cantando villancicos y celebrando que era la primera vez en muchos meses que se veían todos juntos.
Nadie parecía darse cuenta de que si tantos hermanos no se veían durante el resto del año era porque ninguno soportaba a los otros, de tal manera que ninguno llamaba al resto para felicitarles el cumpleaños, salvo la más pequeña de todas, que siempre cumplía con una breve llamada de teléfono en cumpleaños, santos y que era el único verdadero nexo de unión entre todas estas personas. Era la única que sabía como le iba a los demás y se encargaba de comunicar las noticias a los otros.
Los problemas surgieron cuando murió la abuela. La mujer del hijo mayor, convertida de la noche a la mañana en matriarca de la gran familia, hacía cuanto podía para intentar hacer recordar a los seis hermanos el significado de la navidad; esto es, un montón de dinero gastado en decoraciones suntuosas, alguna que otra obra benéfica y cantidades ingentes de comida, de la que sin duda, habría que tirar más de la mitad. Pronto, las navidades quedaron reducidas a la cena de nochebuena. Todos los hermanos acudían desde su domicilio –que casualmente habían establecido en los rincones más alejados del país unos de otros- a la vieja casa, que a todos les parecía antipática y llena de malos recuerdos. Nadie faltaba a esta cena, porque todos sabían que si alguien no iba, automáticamente, el resto haría leña del árbol caído y
Todos se sentaban en el gran comedor, tomaban el primer plato y hacían pequeñas bromas, lanzadas con la peor intención, cebándose en las circunstancias personales de los demás, comentando con sarcasmo los ascensos, y con maledicencia los logros estudiantiles de los retoños de los demás.
A mitad del segundo plato principal, el tono había subido centrándose la conversación, como siempre, en las rentas de las tierras de los abuelos. Y polarizándose las posiciones en quienes creían que habían salido perjudicados en el reparto de la herencia y quienes creían que había sido un reparto de lo más justo.
Para el postre, ya tocaban temas personales, insultándose sin ningún reparo, y prometiendo zanjar algunos asuntos en los tribunales.
Alguna vez, terminaron incluso tirándose los turrones a la cabeza.
Al final, y con alguna que otra copa de más. todos salían despavoridos de la casa, jurando por los cielos que nunca jamás acudirían a la reunión anual, y no volver a pasar ni un minuto más con toda aquella gente a la que odiaban. Pero al final todos volvían a la vieja casa solariega, dispuestos a pasar otra horrible noche, en compañía de la familia. Su familia.
Posted by Towsend at 2:44 PM
23 de Diciembre 2003
-Inciso-
Aquí no hay nada que ver.
Usted, muy probablemente no quería visitar esta página. Seguramente ha encontrado este web log buscando en el Google “Loteria, pedrea, navidad 2003”. Si es así, lo primero que le ha aparecido es esta página, y lo único que encontrará respecto de la lotería de navidad aquí, es un post mío quejándome de ella. Pero no desespere; encontrará la dichosa pedrea aquí -¡Y también podrá comprobar sus décimos!-, pero ya que ha entrado, quizá quiera saber de que va ésto.
Este es un weblog, que para los no versados, es un diario on-line; y como me imagino que no les importa un carajo mi vida, no voy a pretender convencerles de que lean algo, pero si que voy a intentar convencerles de que se abran un diario propio en Zonalibre, que es –sin lugar a duda- el mejor portal de weblogs de ámbito hispano. –Quiero lo mío en billetes pequeños, no consecutivos y sin marcar-.
A todos los demás, que han entrado aquí a proposito: Muchas Gracias.
La Dirección
Posted by Towsend at 10:58 AM
22 de Diciembre 2003
HO! HO! HO!
Volviendo al tema de los desahucios y alquileres varios que comentábamos el otro día, acaba de recibir un cliente una demanda de desahucio por impago entre otros conceptos, del IBI.
Quitando que si lo del Impuesto de Bienes Inmuebles tenía que pagarlo este señor o no, que es una cuestión que llevan años discutiendo, incluso en los Tribunales, hay que tener muy mala sombra para que coincida la notificación de la demanda en la víspera de navidad (o dos).
El casero, como poco se ha ganado el mote de Señor Scrooge.

Posted by Towsend at 4:53 PM
17 de Diciembre 2003
Felicitación Navideña

Posted by Towsend at 12:09 PM
15 de Diciembre 2003
Lotería de Navidad
Que quede claro: Jugar a la lotería de navidad no es una opción. En este –bendito- país nuestro se obliga a la gente desde la más tierna infancia a ser ludópatas sociales. Cualquier currito de a pié, al final de año se ve en la tesitura de tener que comprar lotería del sorteo Extraordinario de Navidad por valor de 230 Eypo para intercambiarla con los conocidos y familiares, con los compañeros de la oficina y del gimnasio, incluso con el amargado de la oficina al que aún nadie ha devuelto su grapadora. Total, para que al final toque una miserable pedrea o algún reintegro. Cuando toca.
Aquí debería intervenir Emea para que –como buen estadístico que es-, nos ilustrase detalladamente con las probabilidades de que a alguien le toque “algo” jugándose un cupón. -¡Ejem!-
En la empresa, se juega “la luna” (el 07). En el bar de la esquina “san José” (el 19). En la frutería del barrio “la Agonía” (el 99), en el bloque de vecinos, como no se ponían de acuerdo, acabaron cogiendo “la Pelea” (el 65). En la peña taurina, en el club de aficionados al macramé. Parece que todo el mundo lleva un número y todo el mundo esta ansioso por compartirlo con el resto de la humanidad.
Y si tienes la desgracia de tener que viajar las semanas inmediatamente anteriores al fatídico sorteo de Navidad, en ese caso estarás obligado a comprar unos cuantos cupones en el sitio donde te encuentres y de paso comprárselos a todo el mundo. “¿Cómo? ¿Has estado en Sort, y NO has comprado lotería? ¡Idiota!”
Y al final tienes doscientas participaciones de menos de dos euros, que no te van a reportar ni para pipas. Aunque te toque el gordo. Porque el truco está en tener billetes enteros de lotería; no participaciones del colegio de huérfanos de los amantes de la grulla campestre. Con perdón para los huérfanos de este ilustre colectivo. Porque así, si te toca algo, te tocará siempre tan repartido, que te amargarás pensando en que no le tenías que haber dado lotería a ese señor tan gracioso de Murcia que estaba de paso por la tintorería.
Que no, que no creo en las loterías. Ya decía mi abuelo, que no hay mejor lotería que una buena economía, y a no ser que no tenga más remedio ni juego ni apuesto. –La ruleta rusa no entra dentro de esta categoría; eso es deporte y diversión al mismo tiempo, como un Kinder Sorpresa.
Ni quinielas, ni primitivas, ni sorteos del oro, ni ciegos. No a la bonoloto, ni a las hípicas. Y mucho menos a las estúpidas apuestas estilo inglés. “Raúl marcará el primer gol del partido, antes del minuto 30, de punterazo y –aquí está el reto- NO besará el anillo”
Que si, que sé que son un chorro de millones, la alegría de la huerta y la ilusión de las navidades. Me van a solucionar la vida, o como dicen siempre- van a tapar algunos agujeros, pero ni por esas quiero comprar Lotería, leñes.
¿Pero y si al final toca?
---
Una sombra acecha al lotero a la vuelta de la esquina. El buen hombre vuelve a casa después de una dura jornada de trabajo. Hasta el día 21, Diciembre es siempre un infierno, con la gente que llama a última hora para ver si le quedan palmeras (el 85). De repente, un tipo con pinta de ansioso, lleva esperando dos horas a que el lotero pase por esa esquina.
“Dos decimos, Alfonso. Que termine en siete”
Posted by Towsend at 4:26 PM
12 de Diciembre 2003
Conflicto de intereses
El Derecho, como he dicho alguna que otra vez, no se puede medir en términos de blancos y negros. Ni siquiera en una bonita gradación de grises. El derecho, si pudiera definirlo en una escala cromática, sería una sucesión de manchas de colores, mezclándose y confundiéndose unas con otras.
Pongamos un ejemplo.
Una señora ya mayor vive en una casa de alquiler desde hace más de 30 años en el barrio de Argüelles, que para quien no lo sepa es uno de los barrios más mejores del Oeste de Madrid.. Paga una renta ínfima que casi ni da para pagar la comunidad de vecinos. El problema radica en que está mujer, alquiló su piso bajo la Antigua Ley de Arrendamientos Urbanos, por lo que dicho alquiler se prorroga indefinidamente con la sola voluntad de la inquilina, siendo casi imposible desahuciarla de la casa mientras que pague sus rentas religiosamente, como así viene haciendo. Por otro lado, esta señora no podría pagar un alquiler a los precios de mercado actuales, porque su pensión casi no le da para pagar la casa donde vive ahora.
Si yo voy ahora a buscar un piso de esas características en esa zona me piden unos 1.000 Eypo al mes y un aval bancario de un año.
Por otro lado, tenemos a los actuales propietarios del piso, herederos de quien le alquiló este piso a la señora a finales de los años 60. Se encuentran que tienen un piso de 150 metros cuadrados en Argüelles, por el que tienen que pagar un IBI considerable. Que tienen a una inquilina a la que no pueden echar de su –su- casa, y que necesitan vender el piso, que es suyo, leñes, porque no llegan a fin de mes.
De momento a los dueños de la casa no les queda más que esperar con una botella de cava en la nevera, que la pobre vieja muera, porque sólo entonces podrán recuperar su casa –la de la señora- Y no hay maldad en esto. Realmente no le desean ningún mal a la pobre señora, pero se encuentran que tienen las manos atadas porque no pueden disponer de su propiedad. No pueden vender ni alquilar la casa.
Y la vieja no se muere
Esta situación es la que se llama en la jerga de los pasillos de los juzgados “una casa con bicho”
¿Quién tiene un mejor Derecho aquí? ¿La vieja? ¿Los dueños del piso? ¿Yo que me muero de envidia, porque una jodida vieja está viviendo en un pisazo en Argüelles por lo que yo pago de coche al mes?
Posted by Towsend at 11:56 AM
4 de Diciembre 2003
En uniforme de trabajo
- Calzoncillos. De algodón, tipo boxer. Comodidad y calor, todo en uno.
- Camiseta. Blanca, con algún tipo de publicidad. Nunca renunciando a los principios.
- Calcetines. De lana, hasta las rodillas.
- Camisa. Azul, de algodón, cuello italiano.
- Pantalon del traje, gris marengo, de lana fria.
- Cinturón. De piel.
- Zapatos “24h” de piel. Para andar. Nunca se sabe cuando voy a tener que salir del despacho escopetado para hacer alguna gestión.
- Corbata. De seda. Mis preferidas, “hermes”. Ya sabeis que regalarme por navidades. Colores calidos o azules, por favor. Nada de rosas.
- Chaleco. De traje. Un buen traje tiene que tener chaleco.
- Chaqueta. De traje, Gris marengo. Aun no le he abierto los bolsillos exteriores.
- Bufanda. De lana, que dé dos vueltas al cuello. En grises y azules. Quiero una bufanda tipo “Doctor Who”
- Abrigo. Para hoy, un tres cuertos impermeable y bien abrigado. sin capucha, maldición.
- Gorro. De lana, forrado de Tinsulate por dentro, que me abrigue bien las orejas.
- Braga, que no bragas. De forro polar.
- Guantes. De forro polar, con piel en la palma y con un forro de tinsulate. Los de 3M se deben estar forrando con el invento.
15 prendas. Hoy hace un frio de cojones. Y Álvaro aun se paseaba por la facultad con la chupa de cuero y la camiseta de Loquillo.
Posted by Towsend at 4:37 PM
2 de Diciembre 2003
La chupa de cuero
Recuerdo a un chaval de familia bien, de esos a los que la adolescencia cogió a destiempo, y que por rebelarse contra su familia se vistió de punki, se dejó rastas y maquinó maldades mientras culpaba de todo a la sociedad.
Siempre que me lo encontraba por la calle, le seguía una nubecilla perenne alrededor de su cabeza. En un año, había pasado de ser un niño pijito a ser un tipo peligroso, de esos que se cagan en el sistema, en los Borbones y en el P.P.
Me contaba que cierto día como no le quedaba dinero después del último fiestón que se había pegado, invitando a sus colegas a todo tipo de estupefacientes, se había dirigido hacia el armario de su padre y sacó una cazadora de cuero, de marca, que su padre apenas se ponía. La metió en una bolsa y se fue a cambiarla por un buen piedro de costo en el poblado moro de Majadahonda. Apenas saco 20 talegos de hachís por la prenda, que en tienda valía 90 o 100.
Después, me enteré del resto de la historia.
Puede que el padre del chico no se pusiese la cazadora a diario, pero era su cazadora favorita y dos semanas más tarde, le apeteció darse una vuelta por la calle con ella.
-¿Oye, donde está mi cazadora de cuero?
-No lo se, creo que me la dejé en casa del Rulillas - (Si, amigos, nuestro protagonista era un chico muy punki que tenía colegas que se ponían nombres raros a si mismos)
-Pues vete a por ella..
Con las mismas, el chaval se vistió con ropa que le hacía parecer que estudiaba en uno de esos colegios de Madrid, regentados por órdenes religiosas y que es donde se forma la élite de la política de nuestro país. Después se fue a una peluquería, se cortó el pelo en ella. Y así vestido, con pintas de llamarse Juan José, se dirigió con paso firme una tienda de la marca de la cazadora, italiana, de diseño, carísima en definitiva, en el barrio de Salamanca y le dijo al dependiente que le sacase cazadoras de cuero, que se quería comprar una.
El dependiente, viendo las pintas y los ademanes que presentaba el niño, empezó a desfilar chupas de cuero quitandoles las cadenas que las ataban, mientras el cliente se las probaba. Finalmente, llegó a una cazadora igual a la del padre y nuestro amigo miró el precio. Ochenta y cinco mil pesetas -en rebajas-.
Corriendo como alma que lleva el diablo, Aprovecho el momento en que el dependiente se daba la vuelta para sacar otra cazadora, y con ella puesta salió a la carrera de la tienda, haciendo saltar las alarmas de los arcos de la puerta, perdiendose entre el gentío de la calle Velázquez y dejando al dependiente plantado como un pasmarote, con una cazadora de cuero en las manos y un tic nervioso en el ojo.
- Ya te he traído la chupa.
- Muy bien, hijo- dijo el padre poniéndosela- ¿me explicas ahora lo de esta etiqueta?
Posted by Towsend at 5:32 PM